domingo, 31 de diciembre de 2023

 La vida es un juego de azar, apueste Usted a su felicidad o a la muerte. En cualquier caso pudiera o no ocurrir el milagro de que sus sueños se hagan realidad, como sea, disfrute que a cada paso nos acercamos más y más a eso que nadie espera pero siempre acecha.

Toca disfrutar, amar, gozar y saborear, incluso los malos ratos que de eso se trata el vivir.

Gracias por el regalo sorpresa, chamaquito hermoso eres una luz en mi corazón.

Gracias, gracias, gracias siempre.

Pinches milagros inesperados jajaja

Sorprendida mente 

Jiz

P.D. Feliz año nuevo.


jueves, 14 de diciembre de 2023

CDG

 "...Mi amor por ti es incondicional. Lo único que te pido a cambio es que, cuando hables conmigo, cuides tus palabras. Que tus palabras sean justas, que sean del tamaño de tus sentimientos. Porque si tú me dices “no” para mi es no. Y si me dices “llueve” para mi está lloviendo. Y si me dices “amor”, para mi es amor.¨

Rosario Castellanos, Los adioses.

                               Amor.

                            Siento de esas mariposas en la panza, envueltas en un perfume bien curioso, ese que provenía de tus adentros y que olía a tempestad. 

                     Tu cama regocija mis lamentos, la lluvia constante que me regalaste y la conjunción de ideas bien locas me tienen atrapada. Te siento cerca, cerquita hablándole a mi interior susurrando un lenguaje con el que mi sonrisa se dilata y no quiere cesar. 

                                             Te quiero para mis carnes, y para mis sueños, y para mis ganas, y para tus gustos, y para que hagamos el amor al amar. También para cuidarte, oír los silencios callar los gritos y dar luz a las sombras. 

Te quiero a lo largo y a lo ancho de mis caderas, también te quiero tanto y te quiero a lo mucho. Así como para tirarnos en el vacío del gozo y recibirnos en el abrazo de lo infinito.

Así pues, te quiero ahogados en besos.

A riesgo de ser una suicida te quiero querer mucho por tanto como la imaginación nos llene.

Enamorada mente Gis, Libertad acompañada de ti.

P.D. sí el insomnio regreso, tengo hambre y lo que me gusta esta lejos y durmiendo. 


Hueco

 Hueco.

A veces los sonidos entran en espacios muy delimitados y se crean ecos, voces constantes que rebotando entre rocas llenas de dolor nos dejan sollozos en los ojos, gotas de agua salada que nos cobijan y a veces, nos ayudan a salvarnos de nosotros mismos.

Esto va por ti.

Celia.

Cuando era una niña, me sentaba en sus piernas y me cobijaba entre sus faldas, a cada uno de sus nietos protegió y cuido con cariño, me peinaba con paciencia y desenredaba mis cabellos necios, me contaba historias, cantaba y bailábamos juntas, cuido de mí y de mis hermanos, hasta que el tiempo pasó lo suficiente como para regresar al pueblo.

Tenía como 80 años y también cáncer, regreso a la Ciudad y ya no había mucho por hacer, metástasis, el cáncer llego a todos lados, vomitó tanto que la sangre corría en el piso y su dolor era incesante, la morfina no hacia efecto y ya pasaba dormida entre lamentos días enteros. El mejor consejo fue: llévenla a su casa.

No paso mucho tiempo, cuando mi mamá iba en camino con mis hermanos y ella había ya partido. Esa noche fue la más larga para mí. Hasta el otro día llegue, y ahí estaba el féretro lleno de flores a su alrededor, los huapangueros tocando incansables, afuera velas y focos encendidos, llegaban mares de personas a despedirla. Yo no pude.

Entre aguardiente y son llego al panteón. Y de nuevo no pude decir adiós.

Hoy 36 años más tarde, te digo gracias, lamento no haber podido darte un abrazo y besarte una última vez, te he extrañado profundamente aun cuando sé, estas sin estar, cada que te he necesitado. Gracias Celia, por haber sido mi abuela, eres parte de mi linaje y sé que allá donde estas, el dolor se disipo y sonríes y bailas y me ves y me cuidas. Honraré tu nombre y cuidaré tu sangre que es la mía y la de mi madre y la de mi hijo, cada paso lo daré segura, contigo en mi espalda y en mi corazón. Gracias por tu herencia huasteca, por el olor a tierra y el orgullo de pertenecer a un linaje de mujeres fuertes y de magia en las manos. Gracias porque, sé que tu mirada tierna se vuelve cuando el miedo me atosiga, y mis demonios me persiguen. Gracias infinitas porque el amor que te tengo perdura de aquí a que las estrellas colapsen.

Te amo, mil veces mil. Descansa que sé que tus brazos me cobijan por la noche cuando tengo miedo y me susurras entre sueños que el frio se disipará, y que ser feliz es prioridad.

Reparadora mente

Gis

Posdata 1. El ruido se fue, se volvió melodía, primero cayeron lágrimas, luego mares y luego solo sal, de esa que adereza, pero ya no lastima.

Posdata 2. Chamaquito hermoso, eres quien quiero que seas hoy y mañana, y a quien dedique mis besos y mis mañanas chillonas y sonrientes. Construyamos paraísos de esos de fantasía tan llenos de ti y de mí. Gracias por estar y por tu paciencia, Te quiero.

jueves, 7 de diciembre de 2023

Pesadilla

 A veces las cosas que imaginábamos de niños se vuelven pesadillas, de esas que son así como culerillas, demasiado real, demasiado crudo, así como es la vida pues.

Me quedo un aroma a hombre en mi piel, bien impregnado, es un hombre de esos de mirada profunda, ojos forrados de pestañas largas y una historia digna para ser oída más de una vez, preferentemente al oído

La primera vez que le vi me gusto su forma, desfachatado, así valiendo madre, modo mamon activado, (rinnnnn mi alarma del gusto se activó). Platicamos y luego de un par de días terminamos encamados, no estuvo mal, pensé, un poco apresurado el asunto, pero sabroso.

Los placeres son cosas que debemos limitar, no al extremo, solo comerlos como delicados bocadillos que necesitamos no se terminen tan rápido. Así pues, el sexo. Eso pensaba hasta que corrí a sus brazos en una escapada extrema, pinche adrenalina que nomás nubla los ojos, escape apenas pude y corrí cual adolescente a verlo, aunque fuera despeinado, o malhumorado solo sea por olerlo y sentirlo. ¿Y si no se repite?, murmuraba mi cabeza, y ¿si nomas es un coto? El caso es que fui a verlo, su desnudez me atormenta, llevo días soñando con él y recordando su aroma.

Hablamos de cosas sin sentido, otras más interesantes

Es… es el diablo, pensé, se disfrazó de deseo. Pasan los días y tengo claro que esto no es algo duradero, ni si quiera pienso en que mañana aparezca en mis sueños.

Tal vez no lo vea de nuevo, o quizás nos encontremos en algún sitio, pero la huella de cada cual, permanece por lo menos hasta donde llega el olvido. Este nunca está cerca, siempre está latente en lo subjetivo del tiempo y en la indecencia de la hervidera de sangre.

Mi pesadilla más recurrente es dejar de tener tiempo, este año en particular ha sido lleno de momentos duros, de alguna forma ya me acostumbré a la huella del olvido. A ese hueco soberbio que deja el amor.

Es la insistencia de mantenerme drogada de dopamina y de esas sustancias que solo el enamoramiento pendejo permite a la corteza cerebral mantenerse en vilo. Mi pesadilla es dejar de soñar en momentos, aromas, dejar de vivir pues. La tanatologa dice que debo traer a la vida de nuevo esos pequeños terrores extremos y dejar de pelear con ellos, hacerlos mis cercanos, al enemigo se le mantiene cerca, no lejos, se le mira y enamora hasta que podamos enterrarle en la venganza de la sonrisa.

Brillosamente Jiz.

Tuve cáncer, soy libre de ese monstruo, aun me faltan matar algunos otros demonios, por el momento brillare como luciérnaga, espero el tercer ojo (y no de pescado) aparezca sin temor y que esta luz destellante permanezca, por lo menos, hasta que mi cuerpo decida dejar de hacerlo.

Gracias, a ti por irte, a ti por llegar, a ti por permanecer y a ti por hacerme sonreír.

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